Watchmen. Decís de la obra definitiva (o la menos eso dicen), realizada por el autor definitivo del género, Alan Moore, con unos personajes que de nada servían (según DC), pero si eso era cierto, ¿para qué hacer una serie con ellos?. Pues muy simple, no habían comprado los derechos de unos personajes para luego no utilizarlos, sería de tontos.
Dicen que esta serie cambio por completo la forma de hacer comics, cosa bastante difícil de apreciar si llevas menos de 15 años leyéndolos y no conoces obras anteriores a ésta, pero tened en cuenta que lo que ha salido del mercado desde ese tiempo hasta hoy no ha sido gran cosa (exceptuando cosillas como Clandestine, por ejemplo) y parte de la culpa la han tenido Rob Liefeld y compañía. Bueno, quizás no hayan tenido ellos toda las culpa, pero si parte.